Si estudias inglés, seguro que te ha pasado alguna vez: sabes vocabulario, recuerdas las reglas… pero cuando intentas hablar, de repente las palabras no salen. Tranquilo: no es un fallo tuyo; es algo totalmente normal. Y tiene una explicación muy sencilla: la diferencia entre el llamado conocido y el lenguaje productivo. ¿Te suena?
Recursos online
Aquí encontrarás una selección de recursos que te pueden ayudar a practicar inglés y francés por tu cuenta: webs, diccionarios, juegos, ejercicios interactivos, vídeos y más. Son herramientas que uso o recomiendo habitualmente, pensadas para reforzar lo que estás aprendiendo, resolver dudas y seguir practicando entre clase y clase.
Cuando llegas a un nivel intermedio-alto, es normal preguntarte: ¿qué más necesito dominar para avanzar?
Cuando te preparas para un examen de Cambridge, es fácil perderse entre libros y apuntes. ¿Estoy estudiando lo correcto? ¿Qué estructuras se esperan realmente en un B1 (PET)? ¿Y en un B2 (FCE)?
Seguro que te ha pasado: te sientas a escribir en inglés, abres el documento… y el cerebro se queda en blanco. Sabes vocabulario, dominas los tiempos verbales, pero cuando intentas juntar las ideas, parece que nada encaja. Tranquilo: no estás solo.
Después de aprender a manejar los tiempos verbales más básicos —como el presente simple, el pasado simple o sus formas continuas—, es habitual quedarse con la sensación de que algo falta. Como si no terminaras de poder contar bien lo que hiciste, cómo lo hiciste, o cuándo empezó exactamente algo que sigue ocurriendo.
Da igual si estás empezando o si llevas un tiempo estudiando inglés: los tiempos verbales básicos son una parte que no conviene pasar por alto. De hecho, muchos de los errores y bloqueos que aparecen más adelante tienen su origen aquí.
Aprender nuevas palabras no es solo cuestión de memorizar listas, aunque a más de uno nos obligaron a hacerlo durante años. Para que un término se te quede y lo puedas usar con naturalidad, necesitas entenderlo en contexto, escucharlo, verlo escrito, decirlo en voz alta… y repetirlo una y otra vez.
Cuando estudiamos inglés, una de las partes más complicadas de practicar por cuenta propia es el speaking. Podemos hacer ejercicios de gramática, ver vídeos o escuchar podcasts, pero… ¿cómo entrenar la expresión oral si no tenemos con quién hablar?







